¿Cómo se relacionan genes, cerebro e inteligencia? Las variaciones genéticas influyen en ciertas áreas de las cortezas frontal, parietal y visual, afectando características cerebrales y la inteligencia simultáneamente, según un estudio.

La inteligencia humana es un tema de gran interés en el ámbito de la investigación científica. Un estudio ha explorado la relación entre los genes, las características cerebrales y la inteligencia, buscando comprender cómo estas variables interactúan entre sí.

Esta investigación es relevante porque ayuda a entender la base genética de la inteligencia y cómo ciertas características cerebrales influyen en ella.

Usando una combinación de pruebas de inteligencia, análisis genético y datos de neuroimagen, los investigadores encontraron que solo hay unas pocas áreas de las cortezas frontal, parietal y visual donde las variaciones genéticas influyen en las características del cerebro que influyen simultáneamente en la inteligencia.

Metodología del estudio

El estudio fue llevado a cabo por un equipo multidisciplinario de investigadores de varias instituciones, incluyendo la Universidad Ruhr de Bochum, Alemania, la Humboldt-Universität Berlin, el Instituto Central de Salud Mental de Mannheim, la Facultad de Medicina de Hamburgo y la Universidad de Luxemburgo.

Se analizaron datos de 557 sujetos de entre 18 y 75 años, obtenidos a través de análisis genético de muestras de saliva, imágenes de resonancia magnética para examinar características cerebrales y pruebas de inteligencia para evaluar el rendimiento cognitivo de los participantes.

Dorothea Metzen, del Departamento de Biopsicología de la Universidad Ruhr de Bochum, explica que «hay miles de genes que contribuyen a la inteligencia», y que el equipo de investigación calculó una puntuación resumida para cada persona que reflejaba su predisposición genética para una alta inteligencia.

Además, se utilizaron escáneres cerebrales para determinar el grosor y el área de superficie de la corteza cerebral, así como la eficiencia con la que se organizan las redes estructurales y funcionales del cerebro.

Hallazgos clave

Los investigadores encontraron áreas específicas en las cortezas frontal, parietal y visual del cerebro donde las variaciones genéticas influyen en las características cerebrales que, a su vez, afectan la inteligencia. Las características cerebrales clave identificadas en el estudio fueron el tamaño de la superficie cerebral y la eficiencia de la conectividad estructural.

Cuando el equipo de investigación analizó la relación entre las variaciones genéticas y las características cerebrales sin considerar los resultados de las pruebas de inteligencia, encontraron numerosas asociaciones en diversas regiones del cerebro. Sin embargo, al analizar qué características cerebrales estaban relacionadas con el rendimiento en las pruebas de inteligencia, se observaron significativamente menos asociaciones.

Implicaciones de la investigación

Este estudio muestra que solo hay unas pocas áreas en el cerebro donde las variaciones genéticas influyen en las características cerebrales y, simultáneamente, afectan la inteligencia. Además, el método utilizado en esta investigación podría aplicarse a otras áreas y rasgos, permitiendo estudiar la interacción de los genes, el cerebro y el comportamiento en diversos contextos.

Erhan Genç, ahora en el Centro de Investigación Leibniz para el Entorno Laboral y Factores Humanos en Dortmund, sugiere que sería interesante aplicar estos métodos en el futuro con cohortes más grandes de miles o incluso decenas de miles de sujetos de prueba, ya que esto mejoraría la calidad de los resultados. Asimismo, considera que estudiar el impacto de la edad en la relación entre genes, cerebro e inteligencia sería un proyecto de investigación futuro interesante.

Desentrañando la relación entre genes, cerebro e inteligencia

Este estudio innovador ha proporcionado información valiosa sobre la relación entre genes, características cerebrales y la inteligencia humana. Los hallazgos clave indican que solo hay unas pocas áreas en las cortezas frontal, parietal y visual del cerebro donde las variaciones genéticas influyen en características cerebrales específicas que, a su vez, afectan la inteligencia. Las características cerebrales decisivas identificadas en la investigación fueron el tamaño de la superficie cerebral y la eficiencia de la conectividad estructural.

La importancia de esta investigación radica en su contribución a la comprensión de la base genética y neurobiológica de la inteligencia humana. Además, el método empleado en este estudio tiene el potencial de ser aplicado en otras áreas y rasgos, ampliando el conocimiento sobre cómo los genes, el cerebro y el comportamiento interactúan en diversos contextos.

La investigación futura podría abordar el impacto de la edad en la relación entre genes, cerebro e inteligencia, así como estudiar cohortes más grandes de sujetos para obtener resultados más sólidos y generalizables. Estos avances en el conocimiento de la inteligencia humana tienen el potencial de impactar en la educación, la psicología y la neurociencia, mejorando nuestra comprensión de cómo la genética y el cerebro influyen en nuestras habilidades cognitivas.

El estudio se publicó en la revista Human Brain Mapping el 4 de abril de 2023.

Resumen: ideas clave

  1. Una investigación realizado por un equipo multidisciplinario de diversas instituciones académicas explora la relación entre genes, características cerebrales y la inteligencia humana. Se analizaron datos de 557 sujetos, utilizando análisis genéticos, imágenes cerebrales y pruebas de inteligencia.
  2. Los investigadores identificaron áreas específicas en las cortezas frontal, parietal y visual del cerebro donde las variaciones genéticas influyen en características cerebrales que afectan la inteligencia.
  3. Las características cerebrales clave encontradas fueron el tamaño de la superficie cerebral y la eficiencia de la conectividad estructural.
  4. El método del estudio podría aplicarse a otras áreas y rasgos para investigar la interacción entre genes, cerebro y comportamiento.
  5. Futuras investigaciones podrían analizar el impacto de la edad y estudiar cohortes más grandes de sujetos para obtener resultados más sólidos y generalizables.
  6. Los hallazgos del estudio tienen el potencial de impactar en la educación, la psicología y la neurociencia, mejorando la comprensión de cómo la genética y el cerebro influyen en nuestras habilidades cognitivas.